GOBIERNO Y PENSIONES

ARTÍCULO DE OPINIÓN LEÍDO EN RADIO ÚBEDA (Multimedia) EL DÍA 11/11/2008

Suele ser muy habitual en la política de nuestro país crearnos necesidades para, después de pasar por el aro, pagar un precio elevado por ellas. Vamos a explicar algunas cuestiones al respecto. Nos hicieron ver la maravilla económica de la tarifa eléctrica nocturna y miles y miles de hogares españoles llenaron sus viviendas de acumuladores al calor -nunca mejor dicho- de una calefacción barata; entonces vino lo inevitable, el apagón; suprimieron la tarifa nocturna y a pasar por caja.

Estamos en puertas de la Televisión Digital Terrestre, aquí el paso no va a ser voluntario, pues el apagón analógico va a ser casi inmediato; otra vez a pasar por el aro, esta vez por narices, sin que quepa la voluntariedad de tener la TDT, y una vez todos digitalizados, vendrán a cobrar por los contenidos -ya lo están anunciando- y seguramente sólo veremos gratis y en abierto los canales de televenta. Hasta ahora observamos que las políticas nacionales benefician descaradamente a empresas eléctricas y de medios de comunicación social.

¿Y qué me dicen del catastrazo? Se podría estar toda la mañana hablando del tema, pero lo cierto, lo tangible y casi nadie habla de ello, es que la subida brutal del IBI va a tener una vertiente en la imputación de rentas que va a hacer peligrar las pensiones: cualquier pensionista que posea una vivienda y algún terrenillo, al incrementarle el valor catastral es más que probable que de su pensión se detraiga el complemento de mínimos, lo que puede dejar su asignación mensual en algo más de veinticinco mil de las antiguas pesetas. Alarmante ¿no? Pues está al llegar.

Otro tema es el telefonazo, también hay que beneficiar a la principal empresa de telefonía. Hasta ahora, los pensionistas venía gozando de un abono social, en función de sus ingresos, que consistía en reducir la factura de teléfono casi a la mitad. Como Telefónica quiere más y más y los sucesivos gobiernos están por la labor, idearon un sistema para subir la factura sin que los pensionistas dieran de baja la línea; ¿cómo?, pues crearon el servicio y la necesidad de la teleasistencia y una vez acogidos todos los pensionistas a esta prestación, les anulan el abono social y a pagar como todo el mundo, sin que sea posible cambiar de compañía, pues la teleasistencia sólo la presta Telefónica. Esto ha sido posible gracias a los baremos que ha aprobado el gobierno que dejan fuera del abono social a los pensionistas que cobran la pensión mínima y que, incluso, no tienen bienes. Yo he visto una factura de telefónica de una pensionista viuda que tiene 14 € de consumo y el total asciende ahora 103 €, esta viuda cobra la pensión mínima fijada también por el gobierno. ¿A quiénes benefician las medidas económicas de nuestros políticos? A los ciudadanos por supuesto que no, nosotros no les vamos a dar nada, prefieren beneficiar a las grandes oligarquías y así, una vez terminado su paso por la política, tener acomodo en los consejos de administración de las grandes empresas y entidades financieras. ¿Creen ustedes, amigos radioyentes, que el ministro Miguel Sebastiám -por citar a uno en activo- va a volver a dar clases en la universidad? La empresa privada lo espera con los brazos abiertos. Y eso es lo que hay. Buenos días.